Tres proyectos del Centro Nacional de Aceleradores y del Instituto de Biomedicina de Sevilla han obtenido financiación en la Convocatoria CaixaResearh en Salud 2023
La convocatoria CaixaResearch de Investigación en Salud 2023 de Fundación “la Caixa” tiene como objetivo «impulsar la investigación biomédica de excelencia con gran impacto social en investigación básica, clínica y traslacional». Tres de los proyectos que han obtenido financiación en la presente convocatoria son desarrollados por centros mixtos que cuentan con participación de la Universidad de Sevilla.
La investigadora Carmen Jiménez, del Centro Nacional de Aceleradores, participa en un proyecto que trabaja en el desarrollo de sensores para controlar las dosis aplicadas en la radioterapia Flash.
Miguel Ruiz Veguilla, del Hospital Virgen del Rocío-IBiS-Cibersam, forma parte del equipo que investiga una estrategia de salud conectada para prevenir el suicidio en personas en riesgo.
Por su parte, la investigadora Carmen Paradas, del Instituto de Biomedicina de Sevilla (IBiS)-Hospital Universitario Virgen del Rocío, participa en un proyecto para descifrar el papel de las alteraciones del metabolismo celular en el desarrollo de la esclerosis lateral amiotrófica (ELA).
La convocatoria, a la que este año se habían presentado 493 propuestas, está dirigida al abordaje de retos de salud, como las enfermedades infecciosas, las neurociencias, las enfermedades cardiovasculares y metabólicas relacionadas y la oncología. Otras iniciativas premiadas desarrollarán tecnologías facilitadoras en alguno de estos campos.
En el bloque de proyectos relacionados con desarrollos tecnológicos, Carmen Jiménez es la investigadora principal por parte del Centro Nacional de Aceleradores (un centro mixto participado por la Universidad de Sevilla, CSIC y Junta de Andalucía) en el proyecto “Desarrollo de sensores que permitan controlar las dosis aplicadas durante la radioterapia Flash”. Esta propuesta ha sido presentada por un consorcio coordinado por Consuelo Guardiola del Instituto de Microelectrónica de Barcelona (IMB-CNM, CSIC) y formado por investigadores del CNA, la Universidad de Santiago de Compostela y del Instituto Curie de París, habiendo obtenido una financiación de 971.936 euros.
El proyecto nace de la mano de una innovadora terapia para el tratamiento del cáncer llamada FLASH que consiste en administrar dosis mucho más elevadas en las células tumorales a una velocidad ultrarrápida. Esto permite aumentar la cantidad de radiación que recibe el tumor, a la vez que se reduce la toxicidad en los tejidos sanos. Sin embargo, la implementación clínica de esta innovadora técnica requiere sensores capaces de cuantificar las dosis en estas condiciones de radiación extrema. En el proyecto se desarrollará un instrumento capaz de monitorizar las dosis aplicadas en la terapia FLASH, lo cual posibilitará optimizar su impacto en los pacientes.
Las otras dos ayudas concedidas a proyectos de equipos de investigación ligados a la Universidad de Sevilla parten del Instituto de Biomedicina de Sevilla (IBiS).
"Una estrategia de salud conectada para prevenir el suicidio en personas en riesgo" es un proyecto en el que participa el IBiS a través del investigador Miguel Ruiz Veguilla. Está liderado por la Fundación Jiménez Díaz, en consorcio con el Hospital Universitario Virgen del Rocío, la Universidad Carlos III de Madrid, la Universidad de Oviedo y el Hospital del Mar. La dotación a este proyecto es de 999.955,00 euros.
Emprender intervenciones basadas en la evidencia científica podría prevenir muchas muertes por suicidio. Actualmente, los teléfonos móviles permiten preguntar a las personas en riesgo de suicidio cómo se sienten en cada momento y en qué entorno se encuentran. Además, la tecnología permite utilizar sensores integrados en el teléfono móvil para registrar el comportamiento de personas en riesgo. El objetivo del proyecto es determinar la efectividad de combinar estas fuentes de información para prevenir los intentos de suicidio y determinar de forma precisa el perfil de las personas que repiten un intento de suicidio. Esto permitirá diseñar estrategias de prevención más eficaces. Para ello se realizará un estudio con personas que hayan sido atendidas por una tentativa de suicidio en alguno de los siete hospitales participantes del proyecto, distribuidos en cuatro comunidades autónomas.
Las muertes por suicidio son un grave problema de salud pública. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, cada año se quitan la vida cerca de 800.000 personas. Es la segunda causa de muerte en personas de entre 15 y 29 años. Un importante porcentaje de las personas que intentan suicidarse sin conseguirlo vuelve a intentarlo durante el año siguiente.
En el proyecto "Descifrar el papel de las alteraciones del metabolismo celular en el desarrollo de la esclerosis lateral amiotrófica" participa la investigadora Carmen Paradas del IBiS.
Es una iniciativa liderada por el CIB-CSIC, en consorcio con el Instituto de Biomedicina de Sevilla - Hospital Universitario Virgen del Rocío, el Institut de Recerca Biomèdica de Lleida (IRBLleida-UdL), y el Centro Singular de Investigación en Medicina Molecular y Enfermedades Crónicas (CiMUS) - Universidad de Santiago de Compostela. Ha recibido una ayuda de 500.000 euros.
La esclerosis lateral amiotrófica (ELA) es una enfermedad neurodegenerativa de la que cada año se diagnostican entre 1,5 y 2 nuevos casos por cada 100.000 habitantes en todo el mundo. Investigaciones previas han relacionado ciertos defectos metabólicos con la aparición de esta patología, aunque por el momento no acaban de comprenderse bien las causas y las consecuencias de esas alteraciones y cómo contribuyen al fallo de la función motora.
Estudios llevados a cabo por el equipo del proyecto han demostrado que las alteraciones metabólicas en las neuronas motoras de pacientes con ELA, desde los estadios presintomáticos hasta la aparición de los primeros síntomas de la enfermedad, ocurren en el citoplasma de la célula, en una región denominada retículo endoplasmático, que realiza diferentes funciones celulares, y en concreto en las membranas del retículo endoplasmático asociadas a las mitocondrias.
En el proyecto, se analizarán y monitorizarán esas alteraciones metabólicas que se producen en las membranas del retículo endoplasmático, tanto en modelos animales como en células humanas y en muestras de sangre procedentes de pacientes con ELA. El objetivo es dilucidar qué papel desempeñan esas alteraciones del funcionamiento de las membranas del retículo endoplasmático en la aparición de la enfermedad. El conocimiento generado abrirá las puertas a la posibilidad de hallar nuevas dianas terapéuticas potenciales.