Por su propia naturaleza, el trabajo de fin de máster sólo puede realizarse una vez completada la mayor parte del trabajo en cada uno de los módulos y materias del máster. En todo caso, de acuerdo con la normativa de la Universidad de Sevilla, sólo podrá ser presentado, evaluado y calificado en actas una vez superado al menos el 70% de los créditos totales de la titulación.
Como ocurre con las prácticas externas, por su propia naturaleza el Trabajo de fin de máster tiene unos contenidos, unos procedimientos y un sistema de evaluación que se diferencian netamente de las materias y asignaturas que componen la mayor parte del plan de estudios del máster. Se trata en este caso de una materia en la que no hay actividades presenciales de aula, sino, esencialmente, un trabajo personal del alumno o la alumna debidamente tutorizado por el profesor o profesora que le haya sido asignado.
Tal y como ha sido concebido para este máster, el Trabajo de fin de máster guarda relación con las prácticas externas, pero claramente va más allá de ellas y tiene un carácter más general, que implica también una mayor actividad reflexiva y de revisión de los contenidos, los procedimientos, las actitudes y los métodos que se han adquirido a lo largo del máster. Partiendo del trabajo que cada alumno o alumna haya realizado en sus prácticas externas, se trata de poner los aprendizajes y actividades realizadas en el contexto más general de la intervención y mediación familiar, reflexionando sobre las conexiones conceptuales y metodológicas entre la práctica supervisada concreta o el trabajo de investigación desarrollado y los conocimientos y métodos (de intervención profesional o de investigación) cuyo dominio debe haberse adquirido a lo largo del máster. Lo que se pide al alumno o alumna es, por tanto, que se distancie un poco de los contenidos concretos de sus prácticas externas y que los sitúe de forma reflexiva y crítica en el contexto de los conocimientos sobre la intervención y la mediación familiar.
El TFM adquiere así un carácter en cierto modo recapitulatorio y obliga a una visión de conjunto en la que se trata de fomentar al mismo tiempo la capacidad de reflexión, la valoración crítica y la capacidad de hacer propuestas que muestren cómo la práctica profesional o de la investigación se relacionan con los conocimientos adquiridos, así como en qué medida esos conocimientos podrían enriquecerse a la luz de la intervención profesional, sea en el contexto del ejercicio profesional sobre el terreno, sea en el de la investigación sobre las distintas realidades familiares.
A lo largo de su elaboración, el alumno o alumna contará con la supervisión de un profesor o profesora del máster, designado por la comisión académica y que normalmente será la misma persona que ha tutorizado las prácticas externas de ese alumno o alumna, pues, como se ha indicado, aunque el Trabajo de fin de máster implique una elaboración y unos contenidos netamente diferentes de la memoria de prácticas o de investigación, parte de los contenidos abordados en esa memoria de cara a una elaboración más compleja e integradora.
El Trabajo de fin de máster se materializará en un texto escrito que será evaluado por una comisión nombrada al efecto por la comisión académica del máster. Dicha comisión estará integrada por tres profesores o profesoras del máster.
Para más información, puede consultar la normativa propia del centro sobre Trabajos Fin de Estudios en el siguiente enlace
(clic aquí). Del mismo modo, se encuentra disponible la normativa reguladora TFE de la Universidad de Sevilla
aquí.