Estos circuitos son fruto de décadas de estudios relacionados con la radiación espacial y bajas temperaturas marcianas
Tras cumplir 250 soles de operación, la revista Nature Geoscience publica los primeros datos recopilados por el instrumento MEDA (Mars Environmental Dynamics Analyzer) a bordo del rover Perseverance de la Nasa, encargado de recopilar datos en el cráter Jezero para caracterizar los procesos físicos en la capa más baja de la atmósfera marciana. Como parte del sensor de viento, el instrumento MEDA, incorpora dos circuitos integrados diseñados en el Instituto de Microelectrónica de Sevilla (IMSE-CNM), centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de la Universidad de Sevilla. Estos circuitos son el “cerebro” del sensor de viento de MEDA y suponen el fruto de una década de estudio de los efectos de la radiación del espacio en los circuitos electrónicos y de la caracterización de la tecnología de fabricación a las bajas temperaturas existentes en Marte.
El instrumento incluye diversos sensores que realizan mediciones meteorológicas, incluida la velocidad y dirección del viento, la temperatura y la humedad, además de la cantidad y el tamaño de las partículas de polvo en la atmósfera marciana. Gracias a ello, es posible estudiar la meteorología espacial y temporalmente variable en el cráter Jezero, demostrando la gran variabilidad de fenómenos existentes en la atmósfera en torno al rover y los ciclos de temperatura día/noche, los flujos de calor, los ciclos de polvo y cómo las partículas de polvo interactúan con la radiación. También ha estudiado cómo se forman las nubes y el viento alrededor de Perseverance.
Los investigadores del IMSE-CNM y coautores del artículo, Servando Espejo y Joaquín Ceballos, así como todo su grupo, confirman que “estar involucrados en una misión de este calibre es un reconocimiento del que estamos muy orgullosos. Que centros pioneros en este campo como el Centro de Astrobiología (INTA-CSIC), que lidera el proyecto, o la misma Nasa cuenten con nuestro grupo para desarrollar los circuitos supone un reconocimiento al esfuerzo de tantos años por realizar ciencia desde nuestra región. Que el trabajo se plasme en publicaciones de primer nivel mundial es motivo de orgullo y sin duda será un impulso para el reconocimiento de la ciencia de excelencia en nuestra región”.
Todas estas medidas no solo son relevantes para el estudio actual, sino que cobran especial relevancia para la próxima misión de la Nasa, denominada Mars Sample Return que debe traer las muestras recopiladas por el rover, así como para futuras misiones tripuladas al planeta rojo.
El Instituto de Microelectrónica de Sevilla (IMSE-CNM) es un centro mixto de I+D+i de la Agencia Estatal Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad de Sevilla (US) que, junto con los Institutos homólogos que tienen su sede en Barcelona y Madrid, forma parte del Centro Nacional de Microelectrónica. El IMSE, situado en la Isla de la Cartuja, encuadra su línea de especialización en el diseño de circuitos integrados analógicos y de señal mixta en tecnología CMOS, así como su uso en diferentes contextos de aplicación tales como dispositivos biomédicos, comunicaciones inalámbricas, conversión de datos, sensores de visión inteligentes, ciberseguridad, computación neuromórfica y tecnología espacial.